La modalidad de trabajo remoto, también conocida como trabajo desde el hogar o teletrabajo en nuestro país, es un tipo de acuerdo laboral cuyos orígenes se remontan a la segunda mitad del siglo XX en Estados Unidos con los estragos de la crisis del petróleo y la imposibilidad de realizar largos traslados desde el hogar hacia el trabajo y viceversa. Si bien en Chile la práctica del trabajo remoto no estaba masificada hasta la segunda década del siglo XXI, producto de la Pandemia de Covid-19 y, consiguientemente, la necesidad de adoptar medidas de protección y resguardo para la población, junto con adecuar el funcionamiento de las empresas llevó a que el fenómeno se ampliara y se convirtiera en una práctica más habitual y con perspectivas de mantenerse en el tiempo.

Si bien Chile experimentó la expansión del trabajo remoto tal como ocurrió en otros países del mundo durante la pandemia, en particular en nuestro país se vivió un fenómeno de nuevo tipo debido a las restricciones de movilidad y la ampliación del acuerdo laboral de trabajo a distancia hacia empresas y tipos de trabajo que presentan rigidez en cuanto a los tiempos en que se realizan las labores, el tipo de tareas que se ejecutan y el lugar donde se llevan a cabo las funciones, lo cual dio origen el fenómeno del “Trabajo Confinado en el Hogar” (TCH), añadiendo nuevos desafíos tanto para los trabajadores que experimentaron esta modalidad, así también como para las empresas que fueron adaptando sus definiciones y formas de trabajar durante el período más crítico de la pandemia de covid-19 en Chile.

La literatura especializada sobre el trabajo remoto (en cualquiera de sus formas y/o definiciones) ha sido enfática en señalar que deben existir “condiciones de base” para que esta modalidad de acuerdo laboral tenga éxito, entre las cuales se cuentan los aspectos materiales y del entorno donde se realiza el trabajo, así también como las condiciones tecnológicas y de comunicación (TICs), junto con los aspectos relativos al tipo de funciones y las características de las empresas y sus estilos de trabajo y cultura organizacional. Estos elementos determinan la efectividad que tendrá el teletrabajo, así también como los niveles de bienestar físicos y mentales de los trabajadores, lo cual repercute en la productividad laboral que se alcanza mediante esta forma o acuerdo laboral.

A continuación, enunciamos algunas sugerencias para tener en consideración a la hora de realizar correctamente el teletrabajo o trabajo desde el hogar:

  • Disponer de un lugar específico para trabajar, con una conexión adecuada y los elementos necesarios para realizar correctamente las labores del día a día.
  • Procurar que exista separaciones en cuanto al tiempo que se destina al trabajo y el tiempo que se destina para otras labores y/o necesidades del trabajador, como cuidados del hogar, de los hijos y tiempo para el ocio. Para evitar las interferencias Trabajo/Familia y Familia/Trabajo.
  • De ser posible, es recomendable que las funciones puedan realizarse en una calendarización mixta, que incluya una cantidad de días de trabajo remoto y otra cantidad de días de trabajo presencial, para no afectar las relaciones interpersonales y las comunicaciones que se dan en el entorno físico de la empresa.
  • Los tiempos destinados para reuniones deben ser acotados, para evitar una saturación de la agenda y el efecto de sentir que se está la mayor parte del tiempo en temas de comunicación y de coordinación, descuidando la gestión y ejecución de las tareas.
  • Disponer de canales de comunicación laboral definidos, evitando la saturación de medios de comunicación e información que generen una especie de colapso o sobre carga de información para los trabajadores, puesto que es común que en este período se haga uso de cualquier TICs disponible (correos, whatsapp, Google Meets, Microsoft Teams, etcétera) produciéndose un efecto de hyperconección que afecta la concentración y el desempeño de los trabajadores.
  • La supervisión debe enfocarse en la gestión de resultados por sobre el seguimiento de las tareas, por lo cual las jefaturas y la organización deben desarrollar un estilo de trabajo que permita autonomía y empoderamiento de los trabajadores en sus funciones y responsabilidades. Este es uno de los principales desafíos a nivel de estilos de trabajo y estilos de liderazgo.
  • Una vez que finaliza la jornada laboral, se debe realizar la desconexión de los medios de comunicación con el trabajo, para que las personas no estén conectadas ni disponibles el 100% del tiempo. Debe existir un quiebre entre trabajo y otras actividades que permita el descanso e idealmente olvidarse de los temas laborales hasta la próxima jornada.

Estas son solo algunas de las medidas que se han mencionado en los estudios recientes sobre la materia, seguramente has experimentado lo bueno y lo malo de esta modalidad que llegó para quedarse y coincidirás con alguna de estas medidas y, muy probablemente, hayas implementado algunas otras. Si quieres revisar literatura más especializada sobre la materia, te dejamos los siguientes links y bibliografía para revisar.

Bibliografía recomendada.

Aliaga, O., Cofré, D., & Soto, R. (2021). Learning to Work While Homebound – The Effects of Remote Work on Job Performance during the Covid-19 Pandemic. Journal of Economics, Finance And Management Studies, 04(06), 772–793. https://doi.org/10.47191/jefms/v4-i6-13

Aliaga, O., Cofré, D., & Soto, R. (2021). Working homebound and its effects on performance and work productivity during the times of Covid-19. International Journal of Innovation Scientific Research and Review, 03(05), 1207–1215. http://journalijisr.com/issue/working-homebound-and-its-effects-performance-and-work-productivity-during-times-covid-19

Bosua, R., Gloet, M., Kurnia, S., Mendoza, A., & Yong, J. (2013). Telework, productivity and wellbeing. Telecommunications Journal of Australia, 63(1), 1–12.

Conejo, F. (2020). Teletrabajo Asistido en los tiempos del Coronavirus (COVID-19). Tecnología Vital, 2(8).

Nicholson, N., & Baruch, Y. (1997). Home, sweet work: Requirements for effective home working. In Journal of General Management (Vol. 23, Issue 2, pp. 15–30).

OIT. (2020). El teletrabajo durante la pandemia de COVID-19 y después de ella Guía práctica.

Venegas Tresierra, C. E., & Leyva Pozo, A. C. (2020). Fatigue and mental workload among workers: about social distancing | La fatiga y la carga mental en los teletrabajadores: a propósito del distanciamiento social. Revista Espanola de Salud Publica, 94.